Una larga tradición filosófica y religiosa ha mantenido el cuerpo como fuera de sus cuestiones. Hasta el punto de que ni siquiera alcanzó la categoría de tema. De ahí se padó a una especie de 'dictadura del cuerpo' archipresente en todas instancias. Hoy, parece que esa presencia se compejifica y hablamos -también- de tecbnoromanticismo, cuerpo electrónico, cyborgs, interactividad...