Una reconocida funeral home neoyorkina
advierte a su clientela que la escritura de
obituarios persigue un propósito esencial,
desencadenar el lamento por no haber
tenido la oportunidad de conocer a esa
persona que lo protagoniza. Los relatos de
Campo Santo absorben esa condición y van
un paso más allá, desmenuzan el género y lo
invierten; la voz que les insufla María
Martoccia se hace oído para dar paso a las
hablas que invocan o conjuran la accidental
fortuna de los muertos, voces que los relatan para que se queden un poco más de este lado
o se vayan de una buena vez... Carlos Ríos
Hay momentos (pero esos momentos son
muchos) en los que María Martoccia parece
estar buscando el núcleo primigenio,
suponiendo que lo hubiera, del arte de
narrar. “...”
Ocurre en las novelas y los cuentos de María
Martoccia, y tanto más en Campo Santo, que
está compuesto por relatos breves.
Martoccia da con esa clave: la que inscribe la
narración, no en lo vivido, sino en lo
atisbado; no en lo que se sabe, sino en lo que
se conjetura; no en lo que se atestigua, sino
en lo que se entrevé. De manera que, al
narrar, no se cuenta con otra certeza que la
que el acto mismo de narrar procura.
Claro que esa certeza es feliz y es suficiente,
tanto para la escritura de María Martoccia
como para cada uno de sus lectores posibles.
Martín Kohan

  • Editorial: BEATRIZ VITERBO
  • Paginas: 156
  • Edición: 2024
  • Idioma: Castellano
  • Peso: 500
  • Alto: 2 mm
  • Ancho: 15 mm
  • Largo: 22 mm
  • Encuadernación: Papel
  • ISBN 9789508454423

Waldhuter Libros
Pavón 2636 - Bs. As - Argentina
Tel.: (54-11) 60914786
[email protected]