La narrativa argentina contemporánea saluda a Martínez de Sanzo, cuyo primer libro de cuentos ya es una realidad. Estos cuentos se inscriben dentro de cierta tradición naturalista. Son historias simples, pequeñas anécdotas que transcurren en una geografía específica, que resulta tan familiar como cercana. La mayoría son breves. Algunos brevísimos. Pero en esa brevedad permanecen comprimidas muchas historias de vida, como si el autor nos ofreciera una versión reducida del mundo. Aunque esa reducción no debe interpretarse como una pérdida, sino como una ventaja. Es el resultado de una urgencia por la especificidad, por dar en el blanco, sin preámbulos. Se leen con una fluidez que incluso podría persuadirnos de la complejidad que encierran. Martínez de Sanzo escribe con una claridad meridiana, con palabras precisas, con frases luminosas y directas. Por lo demás, es cierto que hay una belleza innegable y característica concerniente a las historias simples, pero no hay que perder de vista que esa simpleza gana potencia y fuerza cuando oculta algo, aunque no sepamos qué. Es el caso de este libro. Una colección de relatos que se desintegran en su simpleza para revelar una complejidad difícil de explicar, pero evidente. Basta comenzar a leer el libro para notarlo enseguida y a medida que se avanza en su lectura, la impresión se confirma. El autor logra una voz genuina y a través de esa voz consigue rebasar y rebasarnos. Es la voz característica de quien se posiciona en un lugar inexistente. Desde ese lugar de dudoso privilegio nos hace llegar estas historias, narradas con amabilidad, pero con la capacidad innegable de dislocar y perturbarnos. Para contento y regocijo del lector salvaje.
- Editorial: LETRAS DEL SUR
- Paginas:
134
- Edición:
2015
- Idioma:
Castellano
- Peso:
184
- Alto:
1 mm
- Ancho:
1 mm
- Largo:
1 mm
- Encuadernación:
Tapa blanda
- ISBN
9789874524980
